viernes, 26 de octubre de 2012

Un juego…


... La vida es como un gran juego y nadie puede abandonarlo. Eso es lo terrible y maravilloso al mismo tiempo: no podemos abandonar, no podemos abandonarnos

Cuando en intentos desesperados por dejar de sufrir nos quitamos la vida, o simplemente bajamos lo brazos para que la muerte nos lleve y con ella se lleve nuestro sufrimiento... simplemente pasamos al otro lado

Pero el alivio -si lo hay- es momentáneo, ya que el juego no termina ahí, todo continúa. 
... Ese intento de escapar al sufrimiento solo empeora las cosas: no porque habrá un castigo o arderemos en el infierno...  sino simplemente porque necesitaremos aprender a valorar la vida, jugar el juego hasta el final, atravesar el proceso, ser felices igual, crecer.